Por: Yahoska Jiménez
Históricamente nuestro país, especialmente Managua ha sido afectada por diversos desastres. Entre ellos están los dos sismos de gran magnitud, uno de ellos ocurrió en 1931 y el otro en 1972. En ambas ocasiones la ciudad fue destruida y ocasionaron pérdidas materiales. En este último terremoto se destruyó el centro histórico de la ciudad del cual quedó prácticamente en ruinas.
Según datos del estudio denominado “Managua Sostenible” indica que los terremotos no destruyen, sino las malas construcciones. Al construir una vivienda se debe tomar en cuenta muchas cosas, entre ellas:
- Si la construcción es vertical, la vivienda tiene que ser lo más simétrica posible, tanto en la planta baja como en la planta alta. Si la construcción no posee una simetría proporcional, aumenta las posibilidades de que ante un sismo se produzca una torsión en el piso.
- El largo de la edificación no puede ser tres veces mayor que su ancho.
- Es esencial que las losas estén bien proporcionadas y que tengan la misma forma en todos los pisos de la vivienda.
- Distribución de puertas y ventanas, no deben de superar la mitad del muro.
- La calidad de los materiales es crucial a la hora de construir la vivienda. Un material de calidad mejora la capacidad de absorción de la energía producida por el movimiento sísmico. Es importante el hormigón armado y el acero para que el edificio pueda balancearse de manera adecuada oscilando de lado a lado sin desplomarse.
Además de esto, los cimientos juegan un papel clave a la hora de construir la vivienda. Existen distintos suelos que tienen una profundidad, forma y tamaño distinto al normal, por lo tanto es de suma importancia realizar un estudio de la superficie para saber con determinación el lugar exacto para construir la base del edificio. Un correcto estudio y perfecta construcción permite reducir las deformaciones y esfuerzo que sufrirá la obra durante el movimiento telúrico.