El concreto es uno de los materiales más utilizados en el mundo, por ello requiere de un uso responsable dentro de la sostenibilidad.
El concreto utilizado como material sostenible está siendo empleado en los últimos años debido a que es reciclado al 100%, lo que ayuda a cuidar el medio ambiente.
Según un estudio de la Universidad de California, en el caso de los pavimentos, las superficies de concreto contribuyen a una reducción entre 25 y 38 kg/m2 de CO2 en comparación con las superficies de otros materiales.
En relación a lo anterior, los avances tecnológicos están permitiendo que los fabricantes utilicen métodos cada vez más ecológicos en la región centroamericana.
De acuerdo con una empresa Salvadoreña, en las plantas de la compañía se han implementado un esquema de cero vertientes de líquido hacia el medio ambiente.
El ciclo de producción de concreto que efectúa está empresa está diseñado de tal manera que los residuos líquidos que existen de los lavados de los camiones, de los procesos de producción, de materiales e inclusive de agua lluvia son reciclados y utilizados para parte del proceso nuevamente, eso quiere decir que si el agua que viene sobrante o el que viene de lluvias, se utiliza en una proporción que nos permiten las normas internacionales para poderlo adicionar al producto que la institución produce , y de esa manera no generar vertientes que puedan dañar al medio ambiente
El concreto sostenible posee muchas ventajas y características, además de contaminar en menor medida el ecosistema, entre ellas está producir concretos más durables contra el imperterismo y condiciones severas.
En Costa Rica y Panamá se está utilizando un cemento adicionado con 43% de puzolana, para la fabricación de concretos marinos utilizado en elementos sometidos en condiciones severas para exposición marina.
Otras ventajas del cemento sostenible es el bajo calor de hidratación, lo cual reduce la probabilidad de aparición de grietas en los elementos construidos. Para fabricarlos se realizan pruebas en las cuales se evalúa la sinergia de los materiales utilizados en la formulación del cemento. Estas pruebas consisten en determinar que minerales están presentes en estos materiales alternos, que aporten propiedades favorables para el desempeño de la resistencia del cemento y la durabilidad, los cuales favorecen en un mejor producto al usuario final.